En la vida nos enfrentamos a muchas encrucijadas o dilemas que nos llevan a tomar decisiones u optar por varios caminos. En medio de todo esto están presentes diversos valores personales que forman parte de nuestra identidad personal e incluso familiar, puesto que muchos de ellos los hemos heredado de nuestros (as) antepasados (as) y han caracterizado nuestros árboles genealógicos.
Algunas veces pasa que los conflictos que experimentamos son debido a que no actuamos de acuerdo con estos valores, por lo que es importante rescatarlos y actuar de forma coherente dándoles prioridad en cada una de las elecciones que tomamos conforme avanzamos por el ciclo vital.
Al iniciar un nuevo año debemos organizar los dominios de nuestra vida y en este mes consideramos que es prudente hacer una revisión acerca de los valores personales.
A continuación, les comentamos acerca de tres pasos para lograr este propósito:
a) Reflexionar acerca de nuestros valores
Todas las personas nos regimos por principios o valores centrales que definen la persona que somos. Muchos de ellos pueden estar relacionados con la moral o la espiritualidad y determina aquellas cosas que queremos alcanzar o mantener. Algunos ejemplos de estos valores son los siguientes: amor, amistad y paz, etc. Así que la propuesta que les hacemos consiste en revisar cuales son los valores más importantes para nosotros y de qué forma están presentes en nuestras vidas.
Pensemos que estos valores o principios son como un mapa que nos sirven de guía a través de nuestro recorrido.
b) Hacer una lista concreta por orden de importancia
Seguidamente, podemos realizar una jerarquía de estos, de acuerdo con el orden de relevancia subjetiva. Si algunos de ellos nos parece que no están muy presentes en nuestra vida o al menos no como quisiéramos podemos establecer que acciones concretas podrías ejecutar para incrementarlos.
c) Plasmarla y ubicarla en un lugar estratégico
Para que al colocar esta lista en un lugar visible la tengamos presente diariamente y podamos actuar en coherencia con ello. También es probable que conforme avance el año podamos agregar nuevos valores que descubramos en el camino y que lleguen a convertirse en nuevos pilares.