Las personas a menudo necesitamos de motivos o aspiraciones que nos impulsen en la cotidianidad. Estos son llamados objetivos o metas personales y generalmente reflexionamos sobre ellos al finalizar y empezar un nuevo año.
Debido a que, nos situamos en el tercer mes del año, es necesario realizar una evaluación de los objetivos que nos planteamos para el año 2022, puesto que popularmente se tiene la idea que estas metas son parte de la euforia del cambio de año y que quedan solamente en buenos deseos. Y esto no tiene porqué ser de esta forma.
Tales objetivos en el momento en el que los formulamos fueron importantes para nosotros y constituyeron deseos de alcanzar una mejor calidad de vida, por lo que si los hemos abandonado u olvidado es momento de volver a asumirlos. A continuación, les ofrecemos tres pasos para retomar estas metas personales:
1. Repasar los objetivos que elaboramos para el año 2022
Ya sea que los hayamos plasmado de forma escrita o que necesitemos hacer el proceso de recordar, lo importante es tener claridad acerca de los objetivos que deseamos cumplir durante el año en curso.
2. Revisar si hemos avanzado en el cumplimiento
Desde un criterio realista y sincero debemos revisar cómo ha sido nuestro desempeño y si realmente con nuestras acciones nos estamos acercando al cumplimiento de estos objetivos. Lejos de recriminarnos, en caso de que el panorama sea poco alentador, debemos tomar las riendas de nuestras conductas y retomar tales objetivos.
3. Ajustar los objetivos en caso de ser necesario
Algunas veces es común que a la hora de plantear propósitos antes de iniciar un año nos dejemos llevar por la emoción del momento y no lleguemos a pensar si realmente estos son viables y si contamos con los recursos necesarios para alcanzarlos.
Es posible, que entre los objetivos tengamos que elegir cuales son los más realistas para este año 2022 y establecer en unos sencillos pasos cómo vamos a conseguirlos.
Lo importante es perseverar en su cumplimiento, puesto que únicamente de esa forma alcanzaremos la satisfacción de haber logrado nuestras metas personales, las cuales nos mantienen motivados (as) en la vida diaria y nos acercan a la autorrealización.