El arte nos acompaña a lo largo de toda nuestra vida, nos ayuda a expresar nuestros sentimientos, y nos permite conectarnos con el sentir de un artista que se expresa a través de su música, su pintura, su arte. Pero más allá de “hacernos sentir bien“, o simplemente entreternos, el arte trae consigo varios beneficios que son de especial interés para el adulto mayor:
1) El arte potencia la habilidad mental, incluída la memoria
Entre los beneficios del arte para adultos mayores, ya sea con o sin deterioro cognitivo, se destaca la modalidad participativa, que puede ayudar a mejorar el funcionamiento cognitivo, la comunicación, las habilidades para razonar, la memoria y el pensamiento creativo.
Sabemos que el cerebro puede aprender nuevas disciplinas a cualquier edad. Esto se debe a la asombrosa capacidad de las neuronas para establecer nuevos caminos o rutas por donde llevar la información. Una vez ha que creado ese “camino”, se aprende algo nuevo. Mantener esas rutas activas garantiza un cerebro saludable.
2) Es un alivio a dolores relacionados con la emocionalidad
La artritis y otros trastornos pueden causar dolor crónico, y estos pueden ser exacerbados por dolor emocional u otras dolencias. La naturaleza relajante de la terapia artística no solo reduce estos problemas, sino que también puede reducir la inflamación y la rigidez física en articulaciones y otras partes del cuerpo humano.
La práctica regular de manifestaciones artísticas involucra los dedos, las manos y los brazos. Esta actividad física ligera pero consistente puede promover un mejor flujo sanguíneo y destreza. Con el tiempo, las personas mayores que comienzan a escribir, pintar o dibujar pueden sentirse más ágiles y experimentar menos dolor.
3) La práctica del arte (música,pintura,escultura,escritura) ayuda a la motora fina
Aprender a sostener y a manejar un pincel, un lápiz, un instrumento musical o cualquier herramienta pequeña involucrada en la creación de una obra de arte ayuda a regular los movimientos de la mano y a estimular conexiones cerebrales mientras se desarrolla esa habilidad.
En adultos mayores la pintura ayuda a fortalecer la motricidad fina. La coordinación ojo-mano permite sincronizar los movimientos de ojos y manos mientras se realizan actividades manuales que requieren atención visual.
Finalmente, crear, mostrar o contemplar una obra de arte es divertido, más aún si se comparte con familiares o amigos.
4) El arte es un factor protector a la salud mental
Si la actividad artística es especialmente participativa, esta tiende a mejorar la autoestima, aumenta la satisfacción por los logros obtenidos, y ayuda a superar los períodos de pérdidas personales. Especialmente la práctica del arte en clases o actividades colectivas, como las muestras o presentaciones teatrales, corales o artísticas, disminuyen la ansiedad, levantan el ánimo y hacen que las personas se sientan incluídas socialmente.
5) El arte es un propósito en sí mismo
Darle un sentido a la vida es importante para las personas mayores, especialmente si pasaron la mayor parte de sus vidas persiguiendo objetivos de profesionales o cuidando de su familia. Una vez que se alivianan esas responsabilidades, las personas adultas mayores pueden llegar a desarrollar cierto nivel de incertidumbre sobre su propósito en la vida.
Las actividades creativas como escribir, pintar o tejer, fomentan un sentido de competencia, propósito y crecimiento, todo lo cual contribuye a un envejecimiento integral y saludable. Cuando las creaciones artísticas pueden ser presentadas, mostradas o regaladas, esa sensación de propósito se amplifica en los adultores mayores.
Referencia bibliográfica:
McLean, J., Woodhouse, A., Goldie, I., Chylarova, E., & Williamson, T. (2011). An evidence review of the impact of participatory arts on older people. London: Mental Health Foundation