No es un secreto para nadie que las circunstancias producto de la pandemia por el COVID-19 han sido difíciles para la totalidad de la población, afectando áreas como la economía y la salud física y mental. Por lo que cada persona ha tenido que buscar diversas formas para hacer frente de la mejor manera a las situaciones que se le presentan.
Se dice que más que los acontecimientos, son importantes las actitudes que tenemos hacia ellos, por lo que a continuación ofrecemos unos tips para lograr una actitud optimista en medio de las dificultades.
a) Reconocer los aprendizajes
Hasta la experiencia más negativa representa un aprendizaje y una oportunidad de crecimiento, por lo que es importante que ante toda vivencia significativa nos preguntemos acerca de cómo ella nos nutre o nos enseña una lección. Por lo que cada persona tiene la libertad de decidir si los obstáculos la limitan o le presentan oportunidades ¿Cuántas personas al experimentar una situación difícil, no han logrado valorar de una mejor forma su vida o a sus seres queridos? ¿Cuántos ante un fracaso decidieron levantarse y seguir luchando por sus sueños con más fuerza?
Es por ello, que podemos reflexionar siempre acerca de cuál es la enseñanza que nos brinda determinada situación.
b) Ser una persona agradecida
La gratitud la debemos dirigir hacia tres direcciones: hacia la vida, hacia las demás personas y hacia sí mismo (a). Este punto se relaciona sobre todo con valorar lo que tenemos y reconocer los gestos y el cariño que recibimos de otras personas. Como mencionamos en un blog anterior, a veces somos muy exigentes hacia esas áreas y por ello nos sentimos insatisfechos, al no considerar la vida perfecta o al identificar defectos en sí mismos o en otras personas.
c) Valorar las oportunidades que brinda la adultez mayor
Si nos detenemos a pensar acerca de la etapa de la adultez mayor, nos damos cuenta de que las oportunidades propias de este momento de la vida son múltiples. En tanto, debido a la longevidad cada vez los adultos mayores pueden aprovechar de una mejor manera su tiempo. Ellos ya superaron etapas anteriores como la crianza de los hijos o el empleo y ahora pueden ocuparse de actividades de ocio, aprendizaje y relaciones afectivas de una forma más plena.