Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), la ansiedad “es una respuesta emocional natural que comprende las reacciones que tienen los seres humanos ante la amenaza de un resultado negativo o incierto”. Si bien este es un padecimiento que requiere por lo general un tratamiento combinado entre fármacos y psicoterapia, queremos comentarles acerca de los beneficios de la relajación en la vida cotidiana.
La relajación es primordial en esta etapa del desarrollo porque beneficia la salud del adulto mayor. Al respecto, el neuropsicólogo Luis Rodríguez Recio menciona que algunos de sus efectos son los siguientes (Rodríguez, s.f):
Los beneficios a nivel cognitivo suelen ser: reducción de niveles de ansiedad y mejoría en el autoconcepto y la autoestima, logrando que la persona se sienta más segura de sí misma. Además, la relajación facilita la concentración y la atención, lo que promueve el aprendizaje y adquisición de nuevas habilidades.
En cuanto a los beneficios físicos, se dice que la relajación aumenta el tono muscular y el control sensoriomotor; permite la oxigenación del cerebro, disminuye la tensión muscular y los niveles de colesterol. A continuación, les compartimos dos técnicas que pueden ayudar a los adultos mayores a relajarse:
1-Relajación muscular progresiva de Jacobson
Una de las reacciones fisiológicas de la ansiedad es que los músculos se suelen tensar. Por esta razón, esta técnica permite realizar el proceso contrario, para que el cuerpo logre relajarse.
Sentados en una silla cómoda, la persona adulta mayor deberá tensar (apretar entre 5 y 7 segundos) y luego relajar diferentes grupos de músculos en los que se suele acumular la tensión, estos son:
1. Piernas:
- Pantorrillas: sentado con la punta del pie levantada hacia arriba
- Muslos: estirados realizando fuerza en los glúteos
- Glúteos: apretar los glúteos durante unos segundos.
2. Brazos:
- Manos: cerrar los puños con fuerza
- Bíceps: codo flexionado, intentar llevar el puño cerca del hombro
- Hombros: elevar los hombros hasta las orejas.
3. Músculos respiratorios: mover los hombros como si se pudieran juntar enfrente del pecho).
4. Músculos de la espalda: mover los hombros hacia atrás
5. Músculos del cuello: tensar los músculos del cuello
6. Músculos de la cara: tensar las cejas, levantarlas, cerrar los ojos con fuerza, sonreír de forma exagerada y, por último, imitar la postura de los labios al dar un beso.
Al mismo tiempo que se van tensando y relajando los músculos, se debe ir relajando la mente. Cabe destacar que en adultos mayores que tengan alguna lesión, es importante consultar antes al médico para que él dictamine si es apropiada esta técnica.
2-Relajación a partir de la visualización
Esta técnica consiste en traer a la mente situaciones o recuerdos que evocan sentimientos positivos como paz o tranquilidad. Se recomienda realizarla antes de dormir, acostado en la cama. Se trata de visualizar una escena detenidamente, contemplando cada uno de los detalles e imaginar sonidos u olores agradables, al mismo tiempo que respiramos de forma lenta y suave, sin ninguna prisa (8 técnicas de relajación para dormir mejor, 2021).
Referencias bibliográficas
Rodríguez, L. (s.f) Beneficios de la relajación. Recuperado de: https://salusmayores.es/blog/beneficios-de-la-relajacion/