El 23 de abril es el día del libro y de la lectura ¿Quién no ha disfrutado de un emocionante libro? Y es que la lectura es un hábito tan provechoso que le permite a las personas de todas las edades conocer diferentes mundos y adquirir conocimiento a la vez. En la adultez mayor, la lectura se convierte especialmente en una aliada para el entretenimiento y potenciar la sabiduría que tanto caracteriza a nuestros mayores.
Además, se trata de una actividad que contribuye a la salud porque estimula el cerebro, la memoria, la atención, la concentración y la imaginación de quienes acogen el hábito de la lectura. A partir de la lectura de un libro que resulte interesante para un adulto mayor, están poniendo en marcha las funciones ejecutivas, encargadas de llevar a cabo las actividades cotidianas.
Vidal (s.f) nos dice que “un lector frecuente previene el deterioro cognitivo, porque requiere el ejercicio de distintas zonas del cerebro. Las funciones mentales que se utilizan para leer requieren de las asociaciones, la comprensión de ideas y el funcionamiento de la memoria para mantener la información” . De ahí la importancia de cultivar este hábito con esmero.
Otros beneficios de la lectura en la adultez mayor son los siguientes:
1. Promueve vínculos sociales:
Las personas que acostumbran leer se identifican con las historias o relatos narrados y pueden coincidir con otras personas que posean el mismo gusto por la lectura. Es una actividad que puede ser compartida con diferentes miembros de la familia o de grupos de amigos. E incluso se pueden formar clubs de lectura para contrastar opiniones y aprendizajes.
2. Incrementa el conocimiento del idioma
Al leer las personas adultas mayores redescubren vocabulario antiguo. Sobre todo el proveniente de tipos de lenguaje culto o académico al leer obras clásicas que reflejan parte de la cultura de diversas épocas históricas.
Además, al conocer nuevas palabras y sus significados permite que las personas adultas mayores tengan un compendio más amplio de palabras, lo que facilita la expresión verbal.
Referencias bibliográficas
Vidal, T. (s.f) Leer en la tercera edad mantiene activas las funciones intelectuales. Universidad San Sebastián